Page 22 - Revista Panorama Mayo 2025

Artículo Panorama Universitario

Impuestos, la única forma de sufrir con elegancia

En la actualidad, pagar impuestos equivale a pagar el
“cover” y que no te dejen entrar a la fiesta, lo cual, hace que
pagar impuestos se convierta en un verdadero sufrimiento,
pero eso sí, un sufrimiento elegante

•Por: Eliel Morales Lara

xisten muchas maneras ordinarias de sufrir: que te dejen en visto, repro- arte que cual-
bar un examen con 5.9 o que pierda tu equipo favorito de fútbol. Pero quier estafador
ninguna de esas experiencias se compara con el sufrimiento elevado que de película. Porque no
E representa pagar impuestos. Es un dolor más fino, más silencioso, intrín- se llama “evasión”, se llama
seco a lo social, más... elegante. Porque pagar impuestos es eso: una tortura “elusión” o “planeación fiscal”. Y no lo hacen
burocrática envuelta en sellos digitales, declaraciones anuales, términos que en secreto: lo hacen con asesores, estructuras offshore y toda una orquesta de
suenan a hechizos en latín (“ISR”, “CFDI”, “IVA trasladado”) y una constante tecnicismos perfectamente legales. Claro, si tienes los recursos para hacerlo. Así
sensación de que estás haciendo algo mal, aunque lo estés haciendo todo bien. que tú, pequeño mortal que paga puntualmente sus $1,700 de ISR mensual,
Pero no importa. El sistema te ha educado para sonreír, para imprimir tus eres la base que sostiene el show. Un héroe anónimo de las finanzas públicas,
comprobantes y para sufrir con la dignidad de quien está haciendo “lo co- al que nunca mencionan en los discursos, pero del que dependen más de lo que
rrecto”. Qué bonito es perder dinero con clase y es que uno no nace sabien- admiten. Siéntete orgulloso de eso.
do pagar impuestos, pero al SAT no le importa. Para él, tú ya deberías ser un Más allá del dinero, pagar impuestos implica un desgaste emocional. Cada vez
mini contador con conocimientos de Excel nivel ninja. De pronto descubres que abres el portal del SAT sientes que algo dentro de ti muere. Ese fondo gris,
que hay que inscribirse en el RFC, definir tu régimen fiscal, facturar correcta- esos menús que parecen sacados de Windows 98, esos errores aleatorios que te
mente, hacer declaraciones periódicas y pagar impuestos. Y tú solo querías hacen dudar de tu existencia. Y, sin embargo, lo haces, porque eres responsable,
vender pasteles por Instagram. porque no quieres problemas, porque a pesar de todo, crees en el civismo y en
El sistema no te enseña, solo te exige. Y lo mejor: si te equivocas, la culpa siem- tu país. Porque sabes que algún día, quizás no tú, pero alguien, vivirá en un país
pre es tuya porque “el desconocimiento de la ley no exime de su cumplimiento”. donde pagar impuestos valga la pena. Una especie de inversión a muy largo
Frase elegante para decir: “ya te fregaste”. Y lo haces, vas aprendiendo, ves plazo con la esperanza de una mejor versión del futuro.
tutoriales, preguntas en foros, lloras un poco. Llenas tus formularios, mandas tus Pagar impuestos, en este país, es la única forma de sufrir con elegancia. No
declaraciones y pagas puntualmente. Nadie te aplaude. Pero tú sabes que aca- lloras en público, pero sí en el Excel. No gritas, pero tu alma se parte cada que
bas de completar una hazaña fiscal digna de un adulto funcional y muy patriota. ves tu saldo después de pagar tus impuestos. No protestas, pero cada que ves
El problema no es solo pagar. Es pagar sin ver absolutamente nada a cambio. una obra abandonada te preguntas si ahí está tu dinero.
Porque si el dinero que entregamos se tradujera en servicios públicos funcio- Aun así, sería injusto decir que todo está perdido. Hay esperanza, hay jóvenes
nales, uno hasta lo haría con gusto. Pero aquí pagas y luego cruzas los dedos que entienden el sistema, que lo cuestionan, que exigen. Y mientras sigamos
para que no se inunde tu calle, no te asalten en el transporte o no te enfermes, pagando con conciencia crítica y no con resignación, tal vez algún día el sistema
porque entonces verás lo mucho que tu país te quiere… o no. Pagas para tener nos devuelva lo que damos.
seguridad, educación, salud, infraestructura y lo que recibes son baches, hospi- Sí, pagar impuestos puede ser un acto casi heroico, pero también debe ser un
tales sin insumos y conferencias matutinas donde se dice que “todo va bien”. acto de exigencia. No somos solo contribuyentes, somos ciudadanos. Y como
Pagas como si vivieras en Suecia y manejas como si estuvieras en Mad Max, y, tales, no basta con aportar: tenemos derecho a pedir cuentas, a exigir transpa-
aun así, sigues cumpliendo, porque eres decente, porque quieres hacer las cosas rencia, a preguntar por qué el dinero no alcanza.
bien y sobre todo porque le tienes más miedo al SAT que al karma. Así que la próxima vez que cumplas con tus obligaciones fiscales, hazlo con
Pareciera que el SAT tiene una relación contigo más intensa que tu ex. No orgullo. Pero no olvides que también puedes y debes preguntar: “¿y ahora qué
te ama, pero tampoco te deja en paz. Te manda correos con tono pasivo- van a hacer con mi dinero?” porque si vamos a sufrir, que sea con elegancia y si
agresivo como “Estimado contribuyente: detectamos inconsistencias en su vamos a pagar, que sea con dignidad.
declaración”. Te hace sentir culpable, aunque no tengas idea de por qué.
Y si cometes el error de no contestar un requerimiento, se pone intenso: Gracias por leer, hasta la próxima.
Multas, recargos, bloqueos de cuentas o de sellos digitales. Todo muy profe-
sional, todo muy elegante, todo muy bonito.
Lo curioso es que, aunque el SAT puede enviarte cartas y mensajes cada vez que Autor: Eliel Morales Lara.
quiere algo, si tú necesitas ayuda, prepárate para entrar en un laberinto telefóni- Maestro y licenciado en Derecho, especialista en el ámbito tributario/Abogado
postulante y asesor jurídico especialista en estrategia y defensa fiscal/Socio fundador
co o una fila virtual que parece diseñada para todo menos para conseguirte una y directivo de TRIBUTÓPOLIS, empresa dedicada a los impuestos y servicios legales/
cita. Y cuando por fin consigues hablar con alguien, la respuesta es: “eso debe Articulista con más de tres años colaborando con “Panorama Universitario”
revista de cobertura nacional, enfocada a la comunidad universitaria del país/
consultarlo con su contador”, solo que tú no tienes contador, solo tienes ganas Conferencista y expositor a nivel nacional en temas tributarios de actualidad.
Teléfono celular de contacto: 5548445219
de llorar y de mandar todo al carajo. Correo electrónico de contacto: eliel.morales@tributopolis.com
Aquí es cuando el sufrimiento se vuelve todavía más elegante… pero desigual.
Mientras tú estás quebrándote la cabeza por saber si esa compra de un tóner
puede deducirse, hay grandes empresas que logran no pagar impuestos con más
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