Page 24 - Revista Panorama Diciembre 2024
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Artículo         Panorama Universitario

                  EL DILEMA DE LA ELECCIÓN DEL ENFOQUE METODOLÓGICO
                  EL DILEMA DE LA ELECCIÓN DEL ENFOQUE MET                                    ODOLÓGICO
                                                                                           TIV
                                 EN LA INVESTIGA
                                 EN LA INVESTIGACIÓN DE LO EDUCATIVO
                                                             CIÓN DE LO EDUCA

                                                                                                O
                                           ¿Cuantitativo, cualitativo o mixto?
                                           ¿Cuantitativo       cualitativo o mixto?
                                                             ,
                                                       •Por: Prof. Dr. Antonio Alanís Huerta 1
                             1. Planteamiento general

              Cabe señalar, de entrada, que, desde tiempos remotos, el hombre se ha planteado
              diversos cuestionamientos en relación con el medio que lo rodea; y en torno a este
              medio comparte con sus congéneres lo que se denomina el conocimiento vulgar e
              incluso el sentido común; lo cual, los griegos, denominaban doxa. Sin embargo, en
              la medida en que el hombre se ha interesado por profundizar en el significado de las
              relaciones sistémicas en la sociedad, éste se ha esforzado por comprender primero
              las implicaciones entre los elementos que la constituyen, para explicarse después los
              significados sociales de dichas relaciones; implicando, al mismo tiempo, los efectos de
              sus explicaciones en los demás sujetos de su entorno.
              Hoy sabemos que los enfoques de la investigación sobre los asuntos educativos se
              configuran a partir de la elección de lo cuantitativo y lo cualitativo; y aunque todavía
              en la década de los ochenta en el siglo XX, la elección metodológica solamente tenía
              dos ámbitos, conflictuados y cuestionados desde ambos lados. Es decir, o nos ajustá-  situación en particular. Así, tomamos consciencia del tiempo y el lugar donde nos
              bamos al método de las ciencias naturales (denominado unilateralmente científico) o   encontramos y nos adaptamos constantemente al ámbito donde interactuamos.
              bien, nos aventurábamos por los senderos de lo subjetivo, la coyuntural, lo local y lo   Es decir, pareciera ser que nuestro cerebro, algunas veces, elabora respuestas predeter-
              cuestionable.                                         minadas y otras que requieren una reflexión previa antes de emitirlas, las piensa y las
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              Por fortuna, las controversias y polémicas (bizantinas)  sobre la supuesta objetividad   presenta. En el primer caso, hablamos de las respuestas automáticas que, con frecuencia,
              de la ciencia (de toda la ciencia) poco a poco fue palideciendo, dando cabida a otras   caracterizan nuestras conversaciones cotidianas. En el segundo, entramos en el terreno
              formas de estudiar, analizar y comprender la realidad. Una realidad que, como ca-  de la lectura del texto y del contexto, juntos; lo cual caracteriza al ámbito académico.
              tegoría de investigación, exigía ser tomada en serio por parte de los investigadores   Bien vale señalar que, frecuentemente, las respuestas automáticas se inician con la ex-
              de las ciencias naturales y por los de las sociales. Principalmente, porque la realidad   presión “yo creo que…” En cambio, aquellos problemas o preguntas que requieren
              no es únicamente objetos, cosas y entorno; es también procesos, sucesos, sujetos y   elaboraciones más complejas, hacen que el sujeto reflexione sobre el contenido de la
              fenómenos.                                            respuesta, a efecto de que ésta no se sitúe en el ámbito de la simple opinión personal.
              Entendida así, la realidad de lo educativo es multifactorial, polisémica y compleja. Por   Es así que, en este plano, le damos un giro a nuestra actitud y nos ponemos serios;
              tanto, no podría comprenderse desde una sola perspectiva y enfoque metodológico.   intentando con ello parecer más intelectuales y solemnes.
              Por ello, Edmund Husserl planteó que la realidad puede ser aprehendida a través de   Así mismo, cabe decir que etas respuestas automáticas se inscriben en el plano de la
              la existencia, de la esencia y de la conciencia. Sin embargo, la existencia del objeto o   cotidianidad, pero también, a veces, forman parte de nuestro comportamiento seguro
              del hecho es visible, porque es físico y se puede describir, pero no explicar del todo, en   en diversas situaciones, pues regulan nuestro actuar en la vida cotidiana; y generalmente
              primera instancia.                                    estas respuestas van precedidas de creencias que el sujeto tiene respecto del objeto de la
              En esta perspectiva, “Husserl define la conciencia como un conjunto de actos que   pregunta, del problema tratado o de la conversación común. Sin embargo, en el campo
              se conocen con el nombre de vivencias… Y esta conciencia tiene la peculiaridad de   académico requerimos de la reflexión previa, del análisis y de la valoración del alcance de
              eliminar toda referencia a una existencia real de las cosas, es decir la conciencia no   lo que afirmamos; ya sea por medios orales o escritos.
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              percibe objetos reales, sino que aprehende objetos, que se denominan fenómenos” .   Y es en este campo, el de la seriedad, donde podemos hablar de referentes paradigmá-
              Consecuentemente, si queremos estudiar y analizar la realidad educativa, por medio   ticos, que le permiten al sujeto interactuante, ordenar la secuencia de sus elaboracio-
              de la investigación, habremos de tener en cuenta que dicha realidad no es aprehensi-  nes conceptuales referidas a los objetos de su interés explicativo. Luego, entonces,
              ble del todo con una sola mirada.                     debemos precisar el concepto de paradigma, de tal manera que sea comprensible
              Entonces, la realidad de los educativo no podría limitarse a dos enfoques: uno cuan-  para todos los lectores de este texto, para lo cual se hará referencia a los conceptos
              titativo y otro cualitativo. En medio de ellos hay matices y métodos; técnicas, herra-  planteados por Thomas de Kuhn respecto de los paradigmas. Y la pregunta es ¿Qué
              mientas e instrumentos para el levantamiento de datos; para el acopio de información,   son los paradigmas?
              siempre insuficiente respecto del problema estudiado. Siempre habrá más entre los   A partir de los estudios de T. Kuhn, el concepto de paradigma quedó establecido como
              intersticios de los hechos sociales, de las instituciones y de los enfoques metodológicos   “el conjunto de supuestos teóricos generales, las leyes y las técnicas para su aplica-
                                                                                                                4
              para realizar la investigación de lo social, como es el caso de lo educativo.   ción que adoptan los miembros de una determinada comunidad científica” . Y así es
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                           2. ¿Calidad versus cantidad?             científico, cultural e incluso artístico.
                          El dilema de la elección del enfoque      Ahora bien, de acuerdo con José Cruz, los paradigmas son moldes frecuente-
                                                                    mente inflexibles que sirven de modelo de comportamiento, sumamente “po-
                                  metodológico                      derosos porque son las razones que nos impulsan a tomar una decisión (…)
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              Cuando realizamos cualquier actividad profesional, o incluso de la vida cotidiana, emi-  las personas ya no preguntan nada acerca de la validez de esos paradigmas
              timos un conjunto de respuestas hacia el contexto donde actuamos; dichas respuestas   (…) pues convierten el paradigma en creencia y se aferran a él” . Tal es el caso
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              corresponden a nuestro marco paradigmático activado por nuestro cerebro para cada   de los conocimientos que repetimos, sin cuestionarlos, porque tienen un peso

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